El cine mexicano 1929 - 1940, génesis de una industria cultural

El cine mexicano (1929-1940): génesis de una industria cultural

Del 10 de julio al 10 de octubre del 2013

El Centro de Promoción Cultural del ITESO organizó esta exposición para conmemorar el octogésimo aniversario de los filmes icónicos El prisionero trece y El compadre Mendoza, de Fernando de Fuentes; La mujer del puerto, de Arcady Boytler; y Juárez y Maximiliano, de Miguel Contreras Torres. Con ello, rindió homenaje a una de las etapas de mayor éxito del cine en nuestro país, cuando surgió el cine sonoro, y con él, una industria cultural que llevó las producciones nacionales a otros países. 

Esta muestra, curada por los especialistas Rosario Vidal Bonifaz y Eduardo De la Vega, contó con más de 200 piezas, que incluyen material fotográfico de los equipos técnicos y humanos que llevaban a cabo las producciones. También se incluyeron carteles, programas de mano, lobby cards, periódicos, stills de películas (se presentaron 20 originales, propiedad de Roberto Fiesco), proyecciones de piezas visuales (fragmentos de las películas) y algunos aparatos para filmar y proyectar que se utilizaban en aquellas décadas.

El punto de arranque de la exposición fue el año 1929, cuando los cineastas mexicanos empezaron a experimentar con el sonido. Sin embargo, fue hasta 1933 cuando esta industria alcanzó un nivel de producción considerable que permitió que los filmes llegaran a otros países de habla hispana y a ciudades de Estados Unidos, tal como lo explicó el curador de la exposición, Eduardo de la Vega, en la conferencia de apertura. Por otro lado, Rosario Vidal Bonifaz, también curadora, añadió en el mismo evento que la industria mexicana fue una de las primeras en crear una distribuidora en los ámbitos nacional e internacional, por encima de otros países de habla hispana como España y Argentina.

La exposición contó con núcleos temáticos dedicados a los pioneros del cine sonoro y a la diversidad de géneros como el cine histórico-biográfico, el nacionalismo liberal, el cine folclórico-costumbrista o el conservadurismo, entre otros. Con esto, se da cuenta de que es en esta etapa cuando se consolida la industria del cine mexicano, permitiendo diversificar los temas y géneros en su producción de largometrajes, y logrando un fuerte impacto comercial en América Latina, España y en diversas regiones de Estados Unidos.

Las piezas expuestas fueron prestadas por instituciones, archivos fílmicos y colecciones privadas como la Filmoteca de la UNAM, Mil Nubes Cine, Video Universal y Sistema Sonoro Rodríguez.

Para disfrutar de más fotografías puedes acceder al siguiente enlace: https://www.flickr.com/photos/iteso/9466808112/